Para que una planta, y en este caso un bonsai, crezca adecuadamente es imprescindible que la tierra tenga todos los nutrientes necesario. Esto es vital para que tu bonsai debido a que el espacio reducido de la maceta no tiene la misma cantidad de reservas que en otro tipo de macetas, un jardín o en su medio natural.

Lo más eficaz es tratar de imitar a la naturaleza y para ello hay que tratar de usar abonos orgánicos sólidos de disolución lenta. Los abonos químicos no deberían usarse porque son más agresivos.

Además de usar abono orgánico sólido, es fundamental regar adecuadamente, ya que que si no regamos suficiente el abono no se disolverá y los nutrientes no enriquecerán la tierra. Asimismo, si regamos en exceso, podemos pudrir el abono o aumentar en exceso algún nutriente, provocando enfermedades que puede acabar matando a nuestro bonsai.

En el caso de que decidiéramos usar un abono líquido, hay que tener en cuenta que un producto químico que se debe emplear siguiendo las recomendaciones de uso del fabricante.

Fuente: bonsaimania.com